Comprar coches eléctricos de segunda mano

El mercado de coches eléctricos de segunda mano es un mercado que, gracias a la depreciación, está creciendo mucho más que otros segmentos automovilísticos, y eso es algo bueno. De hecho, es algo natural: La mayoría de los coches pierden valor con el tiempo y los coches nuevos, sin importar sus características, pierden valor más temprano (aproximadamente durante los dos primeros años). Las únicas excepciones son los vehículos de colección, que aumentan su valor a través de los años, pero probablemente no sea el tipo de coche que deseas comprar. Dado que los coches eléctricos todavía son nuevos en el mercado de la automoción, los compradores de vehículos de ocasión tradicionales son reacios a elegir este tipo de vehículos.

Un estudio reciente de USA Today, realizado por Kelley Blue Book, encontró que los coches eléctricos por batería pierden valor más rápido que el resto de los coches. Un Nissan LEAF de 5 años, por ejemplo, probablemente solo se venderá alrededor del 15% de su precio de compra original. A esto se le llama el "coste pionero" de los coches eléctricos. El Nissan LEAF no es el único, aunque en la actualidad es el coche eléctrico más antiguo que ofrece el mercado con el precio de venta más elevado.

Según KBB, en otros coches totalmente eléctricos como el Chevrolet Spark EV y el Ford Focus Electric también es probable que se perciba una considerable bajada de precio. Los modelos más destacados en la lista de coches con una elevada depreciación incluyen a todos los coches eléctricos, incluyendo el Nissan LEAF, el Fiat 500e, y el Smart Fortwo.

¿Buenas noticias para el comprador? El estudio y consenso general de los expertos en la industria automovilística revela que la depreciación de los coches eléctricos no está relacionada con los problemas inherentes a estos vehículos o a su diseño, sino que está más relacionada con que los consumidores están menos interesados en utilizar vehículos eléctricos de segunda mano. Esta resistencia por adoptar lo que se percibe como una nueva tecnología va en beneficio del comprador interesado en coches eléctricos, ya que esto significa que en realidad es mucho más barato comprar un coche eléctrico de segunda mano que uno nuevo, en todos los sentidos.

¿Debo considerar comprar un coche eléctrico de ocasión?

Casi todos los coches eléctricos que se venden hoy en día encajan, más o menos, en el mismo mercado en términos de quién está interesado en la compra y en lo que necesitan de un coche. Con la excepción del Modelo S de Tesla, que aún no cuenta con un mercado de segunda mano activo, la mayoría de los coches eléctricos tienen la misma funcionalidad y, por lo tanto, el mismo perfil de comprador. Un comprador de coches eléctricos es alguien que vive en una zona urbana o suburbana, conduce una media de 30-50 kilómetros al día, es a la vez consciente de su presupuesto y es probable que compre un coche eléctrico como segundo vehículo o como vehículo para intercambiar.

El comprador debe tener un garaje u otro lugar apropiado para instalar una estación de carga (un gasto del que hablaremos más adelante). Los coches eléctricos, en su mayoría, tienen un rango de distancia total de 130 kilómetros antes de que sea necesario una recarga, pero dicha recarga requiere un mínimo de 30 minutos y, por lo general, tarda varias horas en completarse.

Los coches eléctricos son también, generalmente, coches pequeños (subcompactos y compactos) y lo más probable es que no sea el único vehículo del que disponga la persona, ya que no son capaces de realizar viajes largos o conducir donde los puntos de recarga sean limitados. En el aspecto positivo, un vehículo eléctrico tiene mucho menos mantenimiento del que preocuparse y es mucho más barato que el de combustible, repostar cada 130 kilómetros conllevaría un coste de 3.80 € o menos, en la mayoría de los mercados.

¿Por qué un coche eléctrico usado es una buena inversión?

Los “early adopters” – aquellos que compran cosas cuando todavía son nuevas y no han sido probadas– a menudo pagan un sobreprecio para obtener primeros, los últimos y mejores productos. Esto sucede en muchos mercados, no solo en el de la automoción, y prevalece en el campo de la tecnología y aparatos electrónicos como teléfonos inteligentes, ordenadores, etc. Con los coches, los “early adopters” son aquellos que compran un modelo en su primer año de producción, o entusiastas que compran una nueva tecnología tan pronto como esté disponible. Con el regreso de los coches eléctricos en el mercado después de décadas siendo desplazados por los motores de gasolina, el nuevo comprador de coches eléctricos se considera un “early adopter”.

Si estás considerando comprar un coche eléctrico de segunda mano, recuerda consultar el informe de vehículo por matrícula o por bastidor que CARFAX pone a tu disposición para hacer una compra más segura. Gracias al informe CARFAX de vehículo por matrícula tienes acceso a los datos más trascendentes sobre el vehículo de tu interés y puedes conocer su historial. Adquiere en esta página el informe del vehículo CARFAX.

Aspectos a considerar sobre los coches eléctricos usados antes de la compra

Antes de apresurarte a comprar un coche eléctrico de segunda mano, hay algunas advertencias que debemos destacar.

1. Lo primero, como ya se ha mencionado, es la gama baja del vehículo, así como su uso limitado. Para la mayoría de los conductores, más allá de cuánto pueden conducir con el vehículo. Para el conductor estándar estadounidense, lo verdaderamente importante es que hoy en día no se conducen vehículos eléctricos por encima de la gama media.

2. Otra cosa a tener en cuenta es el coste de una estación de carga. Un vehículo eléctrico puede ser conectado a una toma de corriente estándar, pero el proceso de carga sería lento y la batería no se recargará completamente durante toda la noche, en la mayoría de los coches. El tiempo de recarga de una batería casi agotada, para la mayoría de los coches eléctricos, a 120V (toma de corriente estándar) es de más de doce horas. Por ello, la mayoría de los compradores de coches eléctricos querrán instalar una estación de carga. Esto requerirá una toma de 220V y / o cableado, que la mayoría de las casas tienen disponible, aunque probablemente se tenga que realizar la instalación, que conllevará un gasto adicional. También se requerirá un electricista profesional y la estación de carga en sí. Estas a veces se pueden comprar de segunda mano, pero no es lo habitual encontrarlas. La instalación dependerá de las tasas de los electricistas en el mercado local, sin embargo, probablemente tendrá un coste medio del doble del precio de la estación de carga, dependiendo de la cantidad de trabajo requerido para ejecutar la instalación. ¿La buena noticia? Es probable que el ahorro en gasolina de solo el primer año sea más que suficiente para compensar el coste de la estación de carga.

3. También es probable que el coche eléctrico de segunda mano pudiera haber tenido alguna pérdida de capacidad en la batería. La mayoría de los fabricantes ofrecen garantía de sus baterías durante al menos 8 años y para entonces esperan una pérdida del 20 por ciento en la capacidad de sus baterías. Por lo que una autonomía inicial de 130 kilómetros perdería, aproximadamente, unos 25 kilómetros de autonomía. Es importante comprobar la autonomía del vehículo antes de comprarlo, simplemente con una recarga completa podrás comprobar el estado de recarga y el sistema electrónico del vehículo te informará de la autonomía esperada – este será muy preciso, ya que la mayoría de los vehículos tienen sistemas que monitorizan la batería del vehículo para controlar la capacidad de rendimiento y de la batería.

4. También tendrás que familiarizarte con las estaciones de carga disponibles al público en la zona dónde mayormente vaya a circular. El aspecto positivo es que muchos establecimientos instalan estaciones de carga en lugares destacados que también resultan ser plazas de aparcamiento VIP. La regla general suele ser que, si tu coche está conectado y en carga, está permitido aparcar. La mayoría tiene un límite de dos horas, pero normalmente la carga es gratuita.

Crecimiento en el mercado de coches eléctricos de segunda mano

Recopilando toda esta información, podemos ver que un coche eléctrico de segunda mano puede ser de gran valor para el comprador del coche, ya que coincide con el perfil de alguien que puede darle un buen uso a un vehículo eléctrico. Aunque no para todo el mundo, los coches eléctricos son ideales para muchas personas –algunas de las cuales incluso pueden no saber que "encajan en el perfil." Puede que tengas que reflexionar sobre la idea si no tienes un sitio seguro donde instalar una estación de carga, no obstante, si te encuentras en un lugar donde la carga es pública y está fácilmente disponible, puede que esto no sea tan importante. Económicamente, un vehículo eléctrico tiene sentido para muchas personas, especialmente cuando se compra de segunda mano.

Deberás analizar tus opciones, pero, para casi todo el mundo, un coche eléctrico de segunda mano es económicamente mucho más viable de lo que cabría esperar.

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